A muchos de mis amigos progres no les gusta Chávez y el chavismo, pero se resisten a admitirlo, ¿por qué? Pienso que una de las razones es que los medios hablan de Capriles como “el representante de la derecha”. Y cuando escuchan “derecha” mis amigos progres se encrespan, se acorazan y se les enciende en el corazoncito esa retórica de la igualdad, la libertad, el socialismo, y entonces, aunque no les guste Chávez ni el chavismo, se rinden ante él.
Es que, por supuesto, ven lo que ocurre en Venezuela desde el punto de vista español. Si repasan un poquito la historia reciente, encontrarán que Hugo Chávez apareció en escena el día que intentó dar un golpe de Estado contra un presidente elegido democráticamente que se llamaba Carlos Andrés Pérez. ¿Quién era CAP? Era hermano de crianza política de Felipe González, sí, el socialista, ese que ustedes admiran, porque ambos eran hijos políticos de Rómulo Betancourt, uno de los insignes de la Internacional Socialista. González admiraba a Betancourt y de él aprendió muchas cosas. Algunas de las cosas que hicieron juntos CAP y Felipe González fue acabar con VIASA (la línea aérea venezolana) y lo digo para que se vean en ese espejo, ahora que ocurrirá lo mismo con Iberia.
Luego a Chávez lo metieron preso, porque, entre otras cosas en su intento de golpe de Estado se llevó por delante la vida de mucha gente inocente en las calles del país, pero unos años después lo amnistió el presidente, también elegido democráticamente, Rafael Caldera ¿y saben por qué Hugo Rafael se llamaba así? Porque Rafael Caldera era padrino (sí, padrino de bautizo) del pequeño Hugo Rafael Chávez Frías, pues su padre era un maestro copeyano. Copei era el partido más de derecha que había en Venezuela, sin embargo, se conoce como partido SOCIALCristiano.
En Venezuela, cuando uno habla de derecha e izquierda, no se refiere a los mismos conceptos que ustedes manejan aquí. Venezuela es República desde 1810, y aunque ha pasado por distintos períodos y dictaduras militares (MILITARES, como el partido que respalda al actual gobierno) siempre ha sido una república. Venezuela nunca podrá ser de esa derecha en la que ustedes piensan, hasta los curas y monjas venezolanos son más "republicanos" que muchos de ustedes.
Supongo que el hecho de que nuestras realidades políticas sean diferentes es la razón por la que una querida amiga española muy de izquierda me dijo hace un tiempo, “es que tú eres de derechas y podemos hablar sin ningún problema”, y en otra ocasión una persona me dijo, cuando mi hijo iba a hacer la primera comunión, “nunca pensé que tú eras católica”. Esos dos comentarios vienen a mí con frecuencia.
Por otra parte, veo el respaldo que recibe el régimen chavista del mundo y entiendo que todos están ahí por los intereses de sus respectivos países, la primera, Cuba, que vive gracias al dinero venezolano, así como Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y las islas del Caribe. También los Estados Unidos, porque Venezuela es un importante proveedor de petróleo y las empresas norteamericanas están metidas de lleno en la industria petrolera venezolana, como España, por supuesto, no vaya a ser que toquen, entre otras cosas, a Repsol y el yacimiento de gas que el gobierno venezolano le concedió para que se quedaran calladitos (el yacimiento equivale a cinco veces el consumo de toda España).
Lo que sí me parece increíble es que absolutamente nadie recuerde que en Venezuela un 44% de la población votó contra Chávez, son 6.591.304 personas que frente a las amenazas, la maquinaria electoral en contra y muchas veces la desesperanza, votó por Capriles. Y eso fue hace muy poco, en octubre, cuando ganó Chávez y se convirtió en Presidente aunque nunca llegó a juramentarse. Aquí les recuerdo que el PSOE ganó las elecciones en 1993 con el 39,8% de los votos y el PP en 2011 con el 44,6%.
He tenido muy pocos enfrentamientos sobre este tema y lo agradezco, pero como sé que esto es para largo quiero pedirle a mis amigos progres españoles, que son muchos, que si no pueden deslastrarse del apego a una posición política, por favor no intenten de ninguna manera darme discursos didácticos sobre situaciones que ustedes no han vivido, y que nosotros, los venezolanos, llevamos sufriéndolas 14 años, no importa qué tan lejos huyamos.
NOTA: Por favor, a mis amigos venezolanos, si van a hacer algún comentario, nada de insultos o groserías, y mucho menos a los españoles, porque si los insultan a ellos me insultan a mí.
(Publicado originalmente en Facebook)
Alcance a esta nota, unos días después
Me acaba de decir una amiga que el término “progre” está muy “mal visto” y que es muy “facha” decirle “progre” a la gente.
¡Para que vean cómo es la vida! yo que intenté ser lo más cuidadosa posible en el texto que publiqué el domingo (ese sobre la derecha y la izquierda) y resulta que ahora, según dice mi amiga, “le debe haber caído muy mal a mucha gente que les dijeras progres, porque eso es despectivo”.
En fin, que ahora estoy aquí pidiendo disculpas por si alguien pudo sentirse ofendido, esa nunca fue mi intención, y mucho menos usando una palabra que según el DRAE significa “de ideas avanzadas”.
¡Me pasa cada cosa! Ahora ya no me dirán “de derechas” sino “facha”. ¡Ubícate, yomisma, ubícate!
¡Para que vean cómo es la vida! yo que intenté ser lo más cuidadosa posible en el texto que publiqué el domingo (ese sobre la derecha y la izquierda) y resulta que ahora, según dice mi amiga, “le debe haber caído muy mal a mucha gente que les dijeras progres, porque eso es despectivo”.
En fin, que ahora estoy aquí pidiendo disculpas por si alguien pudo sentirse ofendido, esa nunca fue mi intención, y mucho menos usando una palabra que según el DRAE significa “de ideas avanzadas”.
¡Me pasa cada cosa! Ahora ya no me dirán “de derechas” sino “facha”. ¡Ubícate, yomisma, ubícate!
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